miércoles, 10 de febrero de 2016

Cuba: Cimavax, la vacuna contra el cáncer del pulmón que vino a salvar el mundo

Cimavax, es la vacuna cubana contra el cáncer de pulmón que opera desde el 2011.

Un mal pequeño es un gran bien. ¿Se sabe usted este pequeño proverbio africano? 

 
La vacuna contra el cáncer de pulmón desarrollado en Cuba despierta tantas esperanzas, que hasta los Estados Unidos (el viejo enemigo) se compraron los derechos para probarlo en sus clínicas. Los resultados de estas pruebas deben estar disponibles para la próxima primavera.
Cimavax es su nombre, es el fruto de 25 años de investigación de un grupo de científicos del prestigioso Centro de Inmunología Molecular de La Habana. La vacuna ya está disponible gratuitamente para los cubanos desde el año 2011. Con el tratamiento contra el cáncer de pulmón asociado con la vacuna, más de 1.000 pacientes han sido curados en Cuba.


Durante la histórica visita a Cuba del gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, se firmó un acuerdo comercial con el Instituto del Cáncer Roswell Park en Buffalo (Nueva York) para la importación y los ensayos clínicos en los Estados Unidos. Ese tipo de acuerdos entre Cuba y los Estados Unidos era impensable hace pocos años atrás, pero esto fue posible por el gran trabajo realizado por el presidente Barak Obama para descongelar las relaciones diplomáticas y comerciales entre ambos países.
Cimavax ataca directamente a la proteina que hace crecer el tumor pulomar
Lo que esperamos es que, una vez concluido y acertados las pruebas de la vacuna, estos institutos capitalistas norteamericanos no deroguen a la filosofía de sus inventores, que van en contra de cualquier deseo de enriquecerse a cuesta de la salud de las gentes. Si la vacuna es gratuita en Cuba, uno esperaría que el producto sea accesible a bajo costo en otros lugares. No se trata de negocios, pero más bien es una cuestión humanitaria.


El principio de Cimavax opera de tal manera que el producto bloquea la hormona que facilita el crecimiento de los tumores de pulmón. Para ser más claro, Cimavax no cura el cáncer. Es una vacuna que aísla el tumor atacando directamente las proteínas que le permiten crecer. Muchos países están avanzados y comprometidos para inventar una vacuna contra el cáncer de pulmón, tales como Argentina, España o los propios estadounidenses que ya estaban probando dos prototipos sus vacunas (GVAX y BLP 25).


Pero lo que hace que la Cimavax sea más interesante y prometedora de las otras vacunas en estudio, es la esperanza de que puede servir también para el tratamiento de otros tipos de cáncer como el de colon, de los senos, del ovario, del cuello y de la próstata.



Este sistema de escalafon académico le siguen a los estudiantes hasta en las universidades, porque ese es el criterio que definirá mas tarde las plazas para el trabajos.
En Cuba, los mejores estudiantes quieren todos trabajar en el turismo, en la marina comercial y el departamento del comercio exterior para poder tener mejor condiciones de trabajos y oportunidades para salir fuera del pais. Para eso hay que estar ubicado muy arriba en el escalafon para, porque eso te dan el previlegio para elegir donde trabajar cuando te gradues.

Todos esos detalles le dan una idea del estres que tienen los mejores estudiantes cubanos para salir adelante. Esta es la base de su vanguardia tecnica.


¿Cómo un país pequeño puede llegar a esto?


Cuba es un pequeño pais, pero con un pueblo grande






Varios expertos de la biología molecular y de la OMS se preguntan cómo un país tan pequeño, de pocos recursos naturales, puede llegar a ese nivel de investigación científica?
De hecho, puede parecer sorprendente que un vacuna de este tipo ha surgido en Cuba. Pero podríamos encontrar varias explicaciones con respecto.




infraestructuras de investigación disponibles en Cuba




De hecho, la isla siempre ha contado durante mucho tiempo de buenas infraestructuras para la investigación biomédica de alta tecnología, gracias a las grandes inversiones hechas por las autoridades. Cuba cuenta con más de 30 centros universitarios y cada uno tiene su propio instituto de biotecnología, con equipos y herramientas modernos para sostener la investigación.


Por ejemplo, el Instituto de Biotecnología de la Universidad Central de Las Villas, Santa Clara (centro del país), es un institución dentro de un institución. Cuenta con un gran edificio de cuatro pisos que tiene como vecino la facultad de ciencias agropecuarias, situado en el sector de las residencias universitarias Los Camilitos. Está equipado de laboratorios, aulas, centro de investigación de microinformática, un anfiteatro, un generador electrico para asegurar su autonomía cuando hay apagones, y también cuenta de un área experimental de cultivos.

El Instituto de Biotecnologia de las Plantas en la UCLV


Todas estas enormes inversiones terminaron pagando frutos con progresos científicos destacables. Hace unos treinta años, científicos cubanos inventaron el interferón, una molécula utilizada en el tratamiento de enfermedades infecciosas y cánceres que hoy en día se utiliza ampliamente en el mundo.


Un sistema educativo basado en la calidad y el rendimiento académico




Crear centros de investigación no es suficiente para obtener logros impactantes, especialmente en un sistema comunista. También se necesita de un personal cualificado y competente.
En ese aspecto, Cuba también se destaca, con su sistema de educación gratis para todos, para ofrecer a todos los cubanos un nivel mínimo de educación. Para aumentar el coeficiente intelectual de los niños, la Revolución Cubana opta por un concepto más pragmático y visual para los ciclos primarios y secundarios. Los niños dan muchos dibujos generales y técnicos para desarrollar sus habilidades espaciales.

El rectorado de la Universidad Central "Marta Abreu" de Las Villas.

En cada escuela primaria y secundaria, le corresponde la menos un laboratorio para el dibujo técnico, para la música y el baile, y uno para talleres de educación laboral. En estos talleres de educación laboral, enseñan a los alumnos cómo hacer pequeñas herramientas de limpieza, tales como aragonés, trapeadores, escobas, casitas para las aves, pequeños instrumentos de laboratorios de física, etc.
Siendo la educación gratis para todos, las autoridades cubanas son consientes de la situación que se puede llegar a presentar en el país, con una población sobrecalificada como ocurre con países como Irán, Egipto y Marruecos. En estos países poseer un título de doctorado es un requisito normal hasta para un trabajo de menor rango. Pero la educación superior cubana se basa más en la calidad en vez de la cantidad.


Después del noveno grado, de la secundaria, ya los caminos de los alumnos empiezan a abrirse en Cuba. De los egresados de la escuela secundaria, solo el 35 % de la promoción (por orden del escalafón) es ingresado en los colegios preuniversitarios. El otro 65 % de la promoción va para los institutos politécnicos para cortas carreras profesionales. Algunos de ellos de ellos se incorporan en las fuerzas armadas.

Cimavax se puede encontrar en pequeños contenedores


Hay colegios preuniversitarios de ciencias exactas, donde solo van los mejores alumnos, que vienen siendo programas de excelencia incorporados con las empresas mediante adiestramientos. También hay colegios preuniversitarios generales. Las escuelas de ciencias exactas son las que nos interesan porque allí es donde se forma la crema de las cremas de la Revolución.


Esas escuelas especializadas son reservadas exclusivamente para ciudadanos cubanos. Para permanecer en esas escuelas se exige por mínimo entre 92 o 94 % de promedio del curso, mientras que en los preuniversitarios generales bastan con tener 60 % para pasar aprobar el curso.
En el programa de las ciencias exactas, no solo hay que tener el promedio mínimo exigido, sino que el estudiante tiene que cuidar sus notas porque los cuatros últimos aprobados(cualquier sea el promedio) tienen que salir del programa para ir a un preuniversitario general. Es como en una liga de futbol donde los dos últimos de la tabla de posiciones bajan para la división inferior.
Este sistema de escalafón académico le sigue a los estudiantes hasta en las universidades, porque ese es el criterio que definirá más tarde las plazas para los trabajos.


En Cuba, los mejores estudiantes quieren todos trabajar en el turismo, en la marina comercial y el departamento del comercio exterior para poder tener mejor condiciones de trabajos y oportunidades para salir fuera del país. Para eso hay que estar ubicado muy arriba en el escalafón para, porque eso te dan el privilegio para elegir donde trabajar cuando te gradúes.


Todos esos detalles le dan una idea del estrés que tienen los mejores estudiantes cubanos para salir adelante. Esta es la base de su vanguardia técnica.

El instinto de supervivencia




Conocido por sus famosos tabacos finos, pero también por sus cigarrillos de marca "Popular", Cuba paga un precio muy alto por los efectos del tabaco: el cáncer de pulmón es la cuarta causa principal de muerte en la isla.
El tabaco es una de las principales de la mortalidad en Cuba
Lo cual es suficiente como para justificar los 25 años de investigación que los científicos cubanos le dedicaron a Cimavax. Barato y bien tolerado por el cuerpo humano, esta vacuna terapéutica también le sirve a las personas que ya están afectadas por la enfermedad. Cimavax le permite alargar su vida de 6 a 8 meses promedio.


Cuba siempre ha sabido sobresalir de duras situaciones de salud publica, como fue el caso de la epidemia de la dengue que afectó a cerca de 350.000 personas en 1981.
Esas experiencias adquiridas luchando contra virus peligrosos le ha servido para poder inventar vacunas y tratamientos eficaces contra enfermedades como
la meningitis B y la hepatitis B.


Ahora muchos galenos cubanos aportan sus experiencias en muchos países del mundo ya sea en América Latina, en África o en Asia.

El personal de salud en Cuba

En el Congo, a pesar de tener un gran numero de médicos formados el extranjero(incluyendo Cuba), nunca se ha podido erradicar la malaria. Ya no pasa un día sin que decenas de pacientes mueren en el Congo por malaria, hipertensión e incluso la fiebre amarilla que esta de regreso después que los colonos franceses lo habían erradicado. La falta de seriedad y del profesionalismo del personal médico en los hospitales del país es tan caótica que a las gentes, a veces, se le olvidan que la muerte existe.


Entonces, como dijo la escritora Madeleine Chapsal, cuando llegue el momento de la separación definitiva con un ser querido, ya la cosa no va, ni los dolores tampoco valen: en el Congo cuando uno muere, se queda así y es el colapso trágico.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentar el articulo